Se celebró por primera vez el año 1836, aunque se tenía facultad real para celebrarla desde 1832. La feria originariamente era de ganado, siendo unas de las más importantes de Andalucía donde se aglutinaban miles de cabezas de ganado que se vendían en el "Cerro Parra", junto a la alcazaba y aprovechando el agua del maratial natural conocido por el "baño de los caballos".
El actual recinto ferial situado en los aledaños de la carretera de Paradas, es un espacio moderno y totalmente preparado para estos días, lleno de casetas y miles de bombillas, farolillos que dan una luz especial en la noche. Un sinfín de posibilidades se presentan para disfrutar estos días: paseos a caballo, conciertos, concursos de sevillanas; y como no, la posibilidad de disfrutar un rato con familiares y amigos entre un buen plato de jamón, una cerveza o una copa de manzanilla bien fría. Trajes flamencos, vestidos de faralaes, atracciones, alegría… y las tradicionales sevillanas marcheneras que luce con encanto nuestro Real, donde se puede disfrutar de la hospitalidad de los marcheneros. Hasta que los fuegos artificiales anuncien el final del festejo.
En definitiva, donde antes se cerraban acuerdos y se negociaba, hoy se come, se baila y se bebe.
